Esta era una de aquellas canciones que valían por sí mismas más que las virtudes de quien pensaba utilizar su aura de seducción con una dama. Es decir, si se era un absoluto perdedor en materia femenina, esta canción, por el sólo hecho de permanecer sonando en el boliche, obraba como una especie de pócima, de embriaguez náutica capaz de inclinar hacia los labios del pretendiente los labios de la amada.
¿Recuerdan esas historias de cenicientas, príncipes y sapos?. Bueno, "La dama de rojo" venía a ser el encanto de la bruja malvada. Y en este caso, los malos éramos nosotros. Hambrientos lobos desatados en búsqueda de la piel ajena.
Por esas casualidades de la vida, Chris de Burgh (autor de este tema), nació en Argentina, más precisamente en Pergamino, provincia de Buenos Aires el 15 de Octubre de 1948. Es por eso que en este caso, la lady es argentina.
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